Argentina
Llueve. Bs.As. Microcentro
Escrito por JLS

Llueve.
Desde hace mucho.
Llueve sobre el olor a pis
y la caca
humana.
Afuera, un grupo de troskos
y sus pobres…
más pobres, que troskos .
Desde hace mucho.
Cantan bajo el agua,
suenan bombos,
aburridos,
hastiados de la reiteración.
La melodía se repite
y el ritmo y las consignas
se desdibujan.
Por la lluvia
y las luchas olvidadas.
Y es que todo se repite,
el ritmo, la melodía,
la loca del megáfono,
sus proclamas gastadas,
de viejas y de lluvia,
de luchas
que nadie recuerda.
Y la marginación se repite,
la condena social, el oprobio.
El olvido
que no se olvida.
Nadie los va a recibir,
tal vez no lo sepan.
A naides le preocupan.
No los ven;
acaso algún curioso,
por una ventana…
cerrada.
Apenas si los oyen,
mas, para quejarse.
No saben, tampoco…
arriba, otro grupo
de trabajadores
corre la misma suerte,
con otras comodidades.
¡ Qué oportuna la comodidad,
para campear la desgracia ¡
Entre ellos, treinta metros
de trámites mustios,
un techo roto y un futuro.
Chiquito,
pero quién se queja.
Y la fuerzas de seguridad,
ávidas de golpear negros,
de negarlos en cada golpe.
Buscan que, mágicamente,
desaparezcan.
No los mueve el odio,
ni la ignorancia.
Bien que saben,
odiar e ignorar.
Odian su origen.
Buscan ignorar un destino,
que saben inexorable.
Sueñan con que el patrón
se vuelva su dueño.
Temen,
sucumben al pavor.
Ahuyentan a balazos
los fantasmas.
Vagabundos pasean basura.
Disfrazados de basura,
tan sonrientes…
El tren, arrastra pesadamente
estas miserias.
Hasta el barrio, hasta el barro
donde – sospechan –
todos somos uno;
Y somos ellos.
También.
Desde hace mucho.
JLS